Solo se podrá abortar en caso de violación, incesto o peligro para la salud de la mujer embarazada. Se extiende en las calles el rechazo a la sentencia del Tribunal Constitucional.
El Tribunal Constitucional polaco refuerza con este fallo las actuaciones del gobierno de ese país contra las libertades y ahonda la crisis del Estado de derecho y de la separación de los poderes ejecutivo y judicial. La decisión, que no se puede apelar, se ha tomado este 22 de octubre a pesar de las extensas movilizaciones y declaraciones políticas que tanto en Polonia como en otros países europeos exigían el rechazo de esta demanda presentada por el partido gobernante Ley y Justicia (PiS).
Hay que recordar que el actual gobierno de Polonia ha sido cómplice de la declaración de diversos municipios como «zonas libres de ideología LGTBI», y que hace unos meses uno de sus ministros anunció que iban a iniciarse los trámites para la retirada de Polonia del Convenio de Estambul, instrumento internacional y vinculante para luchar contra la violencia contra las mujeres.
La Comisionada para los Derechos Humanos del Consejo de Europa, Dunja Mijatovic, ha declarado que esta decisión «viola los derechos humanos» y va a producir «abortos clandestinos o fuera del país», ya que en la práctica equivale a «una prohibición» del aborto. Hay que señalar que la inmensa mayoría de abortos que se producen en Polonia tienen como causa las anomalías fetales.
Por su parte, la Federación Internacional de Planificación Familiar en Europa (IPPFEN) advierte de que esta sentencia «es un acto cruel de coerción reproductiva, que se ha hecho posible por la erosión del Estado de derecho», y que pone en grave peligro no sólo a las mujeres que necesitan protección y atención «sino a toda la sociedad».
La FPFE expresa su solidaridad con las mujeres en Polonia, y reafirma su compromiso en la lucha para que Polonia y el resto de Estados reconozcan y protejan los derechos humanos, entre ellos el derecho de las mujeres a decidir sobre sus opciones reproductivas.
Lee aquí el comunicado de la Federación Internacional de Planificación Familiar en Europa (IPPF EN)
